Audiolibros de Audible: salvación literaria en momentos complicados

Mientras conduces, haciendo deporte, tareas del hogar o cuando tu bebé duerme a tu lado y no puedes encender la luz. Los audiolibros suponen una solución para seguir disfrutando de la literatura.

Siempre he sido conservador a la hora de ponerme a leer. Solía hacer mis lecturas en papel, en el salón de casa y en el mismo horario. Sin embargo, en los últimos años hay factores que han cambiado esto. Por un lado, pasar más tiempo en el coche desplazándome hasta el trabajo y, por otro, pasar mucho tiempo con mis hijos. En concreto, tener que estar junto a ellos en la habitación a oscuras mientras se duermen. Esto ha hecho que haya optado por los audiolibros de Audible para una gran parte de mis lecturas.

Aunque la lectura en libro de toda la vida sigue hoy siendo mi preferida, tanto el e-book como el audiolibro se han incorporado a mis hábitos. Hoy voy a analizar ventajas de utilizar una aplicación de audiolibros y cómo sacarle partido.

En primer lugar, fue un dispositivo Kindle lo que me abrió las posibilidades y me hizo acceder a títulos que no tengo en papel. Pero la lectura, aunque sea en digital, requiere atención total. Ha sido el audiolibro lo que me ha hecho disfrutar de la literatura mientras conduzco o en esos momentos en los que estoy acostado junto a mi hijo y no puedo mover ni las pestañas para que no despierte. Me pongo los auriculares ¡y a volar!

Por cuestiones laborales, hace dos cursos pasé tres horas al día de lunes a viernes conduciendo. Si sumamos, son 15 horas a la semana, 60 al mes y ¡600 horas durante un curso completo! Al principio me limitaba a escuchar la radio, medio que me apasiona. Sin embargo, no dejaban de ser noticias que ya había visto previamente en la tele u opiniones sobre informaciones que ya conocía del día anterior. Es decir, sentía que estaba perdiendo tiempo de mi vida, mucho tiempo.

Aterrizar en el mundo de los audiolibros

Siempre había recelado del audiolibro porque pensaba que tiene que ser uno mismo el que se ponga su propio ritmo de lectura, el que imagine voces y el que tenga la capacidad de avanzar y retroceder, según lo necesite. Sin embargo, con tanto tiempo al volante lo vi como una posibilidad para leer en una época con poco tiempo para hacerlo.

Hice una búsqueda sobre audiolibros en internet. En primer lugar, probé con audiolibros gratis, pero encontré locutores que no son profesionales, de diferentes nacionalidades y con mala dicción o baja calidad de sonido.

Probé otras formas de descargar audiolibros y, al final, terminé acudiendo a Audible, una empresa de Amazon. Comencé con una prueba gratuita de 30 días y me convenció. De hecho, sale mucho más económico que comprar libros, ya que tiene un catálogo de más de 90.000 títulos, entre ellos los éxitos del momento, que se pueden ir consumiendo de forma ilimitada por 9,99 euros al mes.

En Amazon Audible se puede hacer una búsqueda por títulos, pero también por autores o géneros. Hay audiolibros de policíaca, novela negra y suspense; ciencia ficción, romántica, infantil y juvenil, salud y bienestar, desarrollo personal... Es decir, es como entrar en una biblioteca o en el propio Amazon. Además, hay algunos títulos que son exclusivos de Amazon Audible, junto a títulos en inglés y una selección de podcasts.

Como ejemplo, en el top 10 de audiolibros de desarrollo personal de Audible, están los dos libros de Marian Rojas Estapé y títulos como Resetea tu mente, Hábitos atómicos, Vivir y trabajar con entusiasmo o El poder del ahora. Es decir, no faltan los títulos más vendidos en la actualidad en cualquier librería. Es verdad que veo una mayor presencia de bestsellers que literatura de calidad, pero para tramas más profundas sí que reservo la lectura de toda la vida.

La importancia de la locución en los audiolibros

En mi opinión, una de las desventajas de los audiolibros es que tienes que estar muy centrado y concentrado. Con ello no quiere decir que no esté también centrado también en la carretera, sino que a veces cuando conducimos, tendemos a pensar en nuestras cosas y eso nos puede hacer perder atención al programa de radio que suena o al audiolibro que tenemos puesto. Por eso, es importante que el sonido sea de alta calidad y que la voz sepa interpretar, introducirte en las descripciones, generar expectación, emoción, misterio y alegría. Por eso es tan necesario que el audiolibro sea de calidad. Eso en Audible lo encuentro, ya que su banco de voces está compuesto por algunos de los mejores actores de doblaje españoles.

En cuanto al ritmo de lectura, puedo decir que el comienzo de esta experiencia ha sido la lectura de un libro de casi 500 páginas en 10 horas de escucha. No obstante, tú mismo puedes ponerte tu ritmo. Hay libros que he devorado y que he escuchado del tirón. Es decir, estaba deseando montarme en el coche para conocer cómo seguía la historia. En otros casos, es verdad que hay libros con los que no he conectado tanto, pero la lectura es así con libros que nos gustan más que otros.

Es verdad que el audiolibro siempre te resta libertad en la lectura, ya que terminas otorgando una voz determinada a la historia y te impide, al menos si vas conduciendo, retroceder en la página si no has comprendido bien algo. Por eso es fundamental que el libro esté bien leído, bien narrado y bien interpretado, tener una voz que capte el ritmo es fundamental.

En definitiva, el audiolibro en situaciones de falta de tiempo para una lectura tradicional se ha convertido en un compañero ideal. He escuchado opiniones que indican que escuchar audiolibros no es leer. A mí me da igual el verbo que utilicemos para definirlo porque, en definitiva, se trata de consumir literatura y disfrutar de buenas historias.